Las caries no tienen nada que hacer contra los empastes

Las caries no tienen nada que hacer contra los empastes

Las caries son uno de los problemas más frecuentes en la salud bucodental y para evitarlas es imprescindible que sigas una alimentación saludable y evites el azúcar en dulces y bebidas. Asimismo, es importante que lleves a cabo una correcta limpieza de tus dientes después de cada comida. En ocasiones es inevitable que aparezcan debido a la acumulación de bacterias en la boca, por lo que debes acudir acudir rápidamente al dentista.

Desde Morales Cervera, nos gustaría explicarte qué son las caries y resolver tus dudas acerca de la técnica de empastar.

Si sientes dolores o molestias más leves, como sensibilidad, en alguno de tus dientes es probable que padezcas de caries. Por eso, debes someterte al tratamiento odontológico por excelencia para tratar esta enfermedad: los empastes. El objetivo de este procedimiento es evitar que la caries destruya el tejido del diente afectado y se extienda a otras piezas.

PRIMERA FASE

El proceso de empastar, cuya duración oscila entre los 40 y los 60 minutos, conlleva una primera fase que consiste en limpiar el diente. De esta forma, se elimina todo el tejido por el que se ha extendido la caries y se deja un espacio que se debe rellenar para que no entre comida o suciedad en la pieza dental.

SEGUNDA FASE

El siguiente paso en este procedimiento es rellenar dicha cavidad. El material más común para realizar el empaste es la resina o composite, pero también se puede utilizar metal, oro, amalgama de plata o ionómero de vidrio. El composite dura menos en el diente, pero su color blanco cumple con los requisitos estéticos demandados por la mayoría de los pacientes. 

TERCERA FASE

En el último paso se aplica luz para conseguir que el relleno se endurezca y se pule su superficie. Así, el empaste no molesta al paciente y no se le cae fácilmente al morder. Asimismo, es fundamental que cuides tus dientes tras la intervención, con una correcta higiene dental, y que acudas a las revisiones periódicas con el dentista. De esta manera, evitarás que las caries vuelvan a brotar o que se produzcan en tu boca otro tipo de enfermedades.

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